Si había que volver a escribir en el blog tenía que ser por algo medianamente importante. Después del confinamiento y la pandemia por el dichoso virus COVID-19, la vuelta a la "normalidad" tenía que ser por la puerta grande.
Mi hija este año ha terminado primaria y como regalo por acabar había pedido viajar a Manhattan, ya que ella había estado pero sin enterarse, viajé embarazada de ella allá por el año 2010. Así que nos embarcamos en la odisea de buscar un vuelo más o menos asequible en las fechas que podíamos viajar, que era de Junio a Septiembre.
Tuvimos la suerte de que United Airlines ha inaugurado este verano un vuelo directo Palma - Newark, y buscando, buscando encontré una oferta para el pasado mes de Junio. Ya teníamos vuelo, y quedaba todo lo demás, rellenar y pagar el ESTA, saber que requisitos sanitarios nos iban a pedir, buscar hotel y establecer un planning de lo que íbamos a hacer más o menos. Así que como el tiempo corre que se las pela, llegó Junio y nos fimos de viaje.
Primer día - Vuelo y aterrizaje en Manhattan
El día del viaje amaneció regular, el vuelo se atrasaba 2 horas. En este caso la compañía aérea nos informaba cada poco de donde se encontraba el avión, y durante vuelo recuperaron algo de tiempo, así que no afectó mucho a la organización inicial.
El traslado de Newark a Manhattan lo contratamos con Coach USA, un billete Ida/Vuelta, solo realizan tres paradas dentro de la ciudad y una de ellas, la primera en Port Authority Bus Terminal, estaba muy cerca del hotel que habíamos contratado en primera instancia.
El tema del hoteles bastante peliagudo. Desde España llevábamos contratado un RIU en Times Square, con una reserva ya fijada, nuestra sorpresa es mayúscula cuando al hacer el checkin nos dicen que el precio ha cambiado, unos 1500$ más del precio de la reserva, y que la única opción es bloquearnos la totalidad de este último precio mientras miran el posible error (tampoco nos aseguraban que al final pagáramos lo que teníamos reservado). Así que siendo ya las siete de la tarde, hora local, agotados del viaje, nos ponemos a buscar urgentemente otro hotel, que al menos esté cerca.
Lo encontramos, pagando más de lo que habíamos reservado, pero no la excesiva cantidad que nos pedían. Aunque no se habían acabado los problemas.
Reservamos el nuevo hotel, VOCO Times Square South New York, a través de Booking y tenía trampa. Resulta que reserves para 2, 3 o 4 personas, únicamente incluyen desayuno para 2, es un error de Booking que conoce el hotel y aun así siguen permitiendo este tipo de reservas. Así que ya no la misma noche que llegamos si no al día siguiente hubo que reclamar los 2 desayunos que nos faltaban.
Antes de seguir, he de decir que en el hotel de RIU intentaron arreglarnos el problema. Pero la solución provisional que nos daban, el bloqueo total del importe de la estancia, no nos la podíamos permitir. Nos dejaban sin el 90% de los dólares que llevábamos cambiados y aunque desbloquearan el dinero, tarda en volver a estar disponible (entre 1 y 6 días) así que había bastantes probabilidades que no tuviéramos dinero durante el viaje.
Segundo día - El problema del pase de metro y las excursiones del día
Este segundo día yo amanecí temprano, y aproveché para ponerme las zapatillas y hacer un par de quilómetros a lo largo del río Hudson. Últimamente me llevo las zapatillas a mis viajes, soy bastante madrugadora, y hacer unos km's temprano te permite ver las ciudades desde otro punto de vista. Os dejo una demostración.
Edificio visto desde el rio Hudson |