Hoy ya hace una semana de mi particular hecatombe. Me veo mal y lo peor es que desespero para que esto pase pronto.
La
única forma que he encontrado de serenarme es estando con mi hija,
parece que de la noche al día haya podido generar una paciencia y un
amor infinito hacia ella, no es que no estuviera ya pero ahora para
hacerme enfadar necesita el triple que antes o más y solo deseo sus
besitos y achuchones.
Ayer estuve en el cole con mi ex para hablar
del tema con la profesora, nos comentó que estos enanos son más listos y
más fuertes de lo que parece que no vale la pena ocultar nada mejor
decírselo poco a poco que lo vayan asimilando e intentar que noten lo
menos posible la ausencia de uno u otro.
Evitar esas ausencias es
lo que más me cuesta a mi, por que eso implica ver a mi ex más de lo
deseado y aunque sé que es por el bien de a peque a mi me hace mucho
daño.
Sé que el tiempo lo cura todo, pero...¿podría ir un poco más rápido?
Besos.
Sobre mí
Hola! Soy una mamá informática que no para quieta. Este blog es un reflejo de todas mis aficiones. Espero que lo disfrutéis.
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